Nuestra vida no se parte en dos en el momento en que entramos al trabajo. Nadie es capaz de dejar sus sentimientos fuera de la oficina y recuperarlos cuando se acaba la jornada laboral. Somos un todo en uno a la vez: profesionales, amigos, padres, aficionados a alguna actividad o deporte, etc. Lo mismo pasa con nuestras emociones. Encontrar la felicidad en todas las facetas…